La inflación se encuentra en aumento en una cantidad preocupante de países del mundo. Existe una multitud de razones por la que esto está ocurriendo. Pero para comprenderlas, es necesario, antes, saber qué es la inflación.
En este artículo te mostraremos qué es la inflación y cuáles son sus principales causas.
Qué es la inflación
La inflación puede definirse como el aumento generalizado de los precios de los bienes y servicios de una economía durante un período de tiempo determinado. Puede afectar a cualquier tipo de producto o servicio como los alimentos, la salud, el combustible, la energía, el ocio, etc. Cuando la inflación prevalece en la economía y las expectativas aumentan, se convierte en una preocupación real que preocupa tanto a los consumidores como a las empresas privadas.
Causas de la inflación
Las causas o los factores que influyen en la inflación se pueden separar en tres puntos: los costes de producción, la demanda y la política fiscal.
Aumento de costes de producción
La inflación puede aumentar debido a un aumento de los costes de producción que incluye tanto las materias primas como los salarios. En estos casos, la demanda se mantiene estable, pero la oferta disminuye por este aumento de costes. El resultado son precios más altos por los mismos productos.
La inflación causada por los costes de producción puede comenzar por un aumento en los precios de materias primas como el petróleo, que es un componente principal de producción dentro de distintas industrias.
Aumento de la demanda
La inflación producida por la demanda ocurre cuando los consumidores se decantan por un producto o servicio en concreto. Cuando hay una demanda mayor que el promedio de una variedad de bienes en la economía, los precios tienden a aumentar si la tendencia se mantiene a medio y largo plazo.
En los casos que la economía crece, el desempleo es bajo, los salarios aumentan y la confianza del consumidor es más alta que el promedio, se producen gastos mayores. La expansión económica influye de forma directa en el nivel de gasto de los consumidores, lo que se puede traducir en una mayor demanda de productos y servicios.
Asimismo, cuando aumenta la demanda sin anticipaciones, la oferta acaba por disminuir. Menos artículos disponibles significa que los consumidores estarán dispuestos a pagar más para obtenerlos. El resultado son precios más altos y una inflación de la demanda. Estas situaciones están descritas en el principio económico de oferta y demanda.
Política fiscal
La política fiscal del tipo expansiva puede dar como resultado aumentos en los ingresos tanto para las empresas como para los consumidores. Cuando el gobierno busca estimular la economía, de esta manera, el aumento en la demanda de bienes y servicios puede acabar provocando inflación.
Las medidas de política expansiva reducen las tasas de interés y, en consecuencia, el coste de los préstamos. Este aumento del dinero disponible en todos los niveles de la economía lleva a un mayor gasto y, en consecuencia, un aumento en la demanda y los precios de bienes y servicios.